martes, 9 de diciembre de 2008

Cine

Entre las cosas que la torrente de los días se llevó para siempre, guardo entre mis recuerdos aquella época de despreocupadas tardes de cine en “El Cervantes”. Nombre que con el tiempo descubrí apropiado para una sala que se destacaba por sus películas donde las aventuras y la violencia adosada al humor, eran el ingrediente principal.
De aquellas películas muchos cordobeses recordarán especialmente los “western spaghetti” , filmes de vaqueros producidos por la industria cinematográfica italiana, que más en broma que en serio, rememoraban la epopeya de la conquista del oeste norteamericano.
Con mis amigos solíamos divertirnos a lo grande en esas “fugas” de los deberes cotidianos, que al tiempo generaban graciosas discusiones ya que los argumentos de esas películas eran todos muy parecidos y cada uno recordaba las historias de diferentes maneras, mezclando títulos, actores y desenlaces.
Poco de la verdadera historia del oeste debemos haber aprendido, algún lenguaje soez por el dudoso doblaje y casi nada más. Pero el tiempo y eso de que no podemos bañarnos dos veces en el mismo río, me permitió descubrir en esa maraña de recuerdos, el trasfondo cultural que nos dejó todo aquello: detrás de toda esa avalancha de imágenes, estaba La Música y uno que otro genio:



Ennio Morricone "El bueno, el malo y el feo" película dirigida por Sergio Leone en 1966